La pandemia de la COVID-19 no sólo está dejando una gran crisis sanitaria en nuestro país, sino también una gran crisis económica.
La gran cantidad de empresas que han tenido que cerrar sus puertas ha dejado mucha gente sufriendo económicamente.
Desde autónomos que han dejado de recibir ingresos a familias que ahora deben convivir con el resultado de un ERTE. Por suerte, en tiempos de crisis han aparecido gran cantidad de ayudas destinadas a reducir los problemas económicos de la gente.
El Gobierno decretó una moratoria en el pago de hipotecas de un mes, aunque ahora lo ha ampliado a tres meses. Una moratoria consiste en un aplazamiento del pago de las mensualidades hipotecarias. Esta moratoria se ha puesto en marcha para aquellas personas que hayan perdido su empleo o hayan visto reducidos sus ingresos como consecuencia de crisis económica y laboral derivada del coronavirus.
Para poder acogerse a esta moratoria hay que cumplir una serie de requisitos.
Si bien es cierto que esta moratoria ha sido una medida promovida y puesta en marcha por el Gobierno, lo cierto es que diferentes entidades bancarias han puesto en marcha sus propias moratorias de hipotecas y préstamos al consumo, de hasta 12 meses de duración. En este sentido, infórmate también en tu banco, para ver cuáles son las condiciones, por si puedes beneficiarte de dichas moratorias.
Una de las primeras cosas que se puso en marcha fue el asegurar el suministro de energía a todo el país. De esta forma se pusieron en marcha una serie de ayudas en energía, además de medidas en telecomunicaciones que a continuación te contamos.
En primer lugar, se permite reducir la potencia en una empresa para que la factura de electricidad sea menor. Además, muchas compañías han afirmado que dicha modificación de potencia será gratuita.
En relación al bono social, aquellos que ya lo tuvieran han sido renovados de forma automática hasta septiembre. Dicho bono social es una reducción de hasta el 40% en la factura de electricidad para consumidores vulnerables, como familias numerosas, pensionistas y desempleados. Mucha gente puede acceder a este bono social debido a su actual situación de desempleo. Además, se ha puesto en marcha un bono social para autónomos, del cual se pueden beneficiar aquellos autónomos que hayan perdido, al menos, un 75% de facturación.
Las diferentes compañías españolas han decretado sus propias medidas como suspensión de los cortes de suministro durante la crisis o la financiación de las facturas sin intereses.
Los costes regulados por el Gobierno, como el precio de las bombonas de propano o butano, se mantiene congelado hasta septiembre.
Si bien al principio del estado de alarma no se podían realizar portabilidades, en la actualidad ya se puede, aunque las diferentes compañías de telefonía no pueden modificar sus precios o condiciones, ni realizar publicidad u ofertas sobre sus tarifas.
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