

Vender la mitad de un piso puede ser complicado y perjudicial económicamente si no se llega a un acuerdo. Hay varias opciones cuando se trata de un proindiviso, pero la mejor siempre es intentar encontrar un punto común.
Las situaciones más comunes en las que se posee una vivienda a medias con otra persona suelen ser en el matrimonio o una herencia entre hermanos o familiares. Cuando se produce un divorcio o una herencia entre varias personas, puede darse el caso de que una de las personas propietarias quiera vender la mitad de su piso y la otra parte no. En esa situación, ¿es posible vende la mitad de un piso?
Opciones para vender la mitad de un piso
La Ley es muy clara cuando se trata de un bien divisible. El Código Civil establece que ningún copropietario está obligado a permanecer en esa vivienda y que se puede solicitar la división de la propiedad común. Es decir, si hablamos de una finca con varias viviendas o una casa grande que se pueda dividir en dos, uno de los copropietarios podrá vender su parte sin consentimiento del otro.
No obstante, en la mayoría de los casos se trata de un piso que no se puede dividir porque, si se hiciese, las nuevas viviendas no cumplirían con la normativa de habitabilidad. Legalmente, a este bien se le llama proindiviso.
Hay que tener en cuenta que, cuando se quiera vender un piso por divorcio o separación, no podrá hacerse si la casa está judicialmente asignada a los hijos comunes de la pareja.
Lo más sencillo: llegar a un acuerdo
La alternativa más recomendable en esa situación es tratar de llegar a un acuerdo con la otra parte. Es la que menos tiempo y menos gasto va a suponer a ambos. Puedes optar por vender tu parte de la casa a la otra persona propietaria, lo que se conoce como “disolver el condominio”.
Si la otra persona no dispone de la financiación para comprarla y se niega a venderla a un tercero, también podéis plantearos alquilarla entre ambos. De esta manera, no habrías vendido la vivienda, pero obtendrías beneficio por ella. No obstante, el problema de esta opción es que tendrías que seguir manteniendo ciertos gastos de la casa, además de mantener la comunicación con el otro copropietario para gestionar el alquiler. Además, todos los propietarios deben estar de acuerdo en las condiciones de alquiler.
¿Se puede obligar a vender?
La Ley no obliga a los copropietarios a vender su parte de un proindiviso si uno de ellos quiere hacerlo. Sin embargo, hay procesos judiciales a los que puedes recurrir si tú quieres vender la mitad de tu piso.
En primer lugar, lo recomendable es solicitar un acto de conciliación. Se trata de un proceso legal en el que se trata de llegar a un acuerdo entre las partes antes de llegar a juicio.
Si aún así no se llegase a un acuerdo, entonces un juez puede dictaminar que la vivienda sea liquidada en subasta pública. ¿Qué supone esta subasta pública? Pues que los propietarios deberán abonar el coste de una nueva tasación de la casa (aunque ya la hubiesen tasado anteriormente) y que se repartirán proporcionalmente los beneficios.
La subasta será una venta al mejor postor y a los beneficios habrá que descontarles los gastos judiciales. Es una mala opción en principio porque los beneficios se pueden ver considerablemente reducidos. Por este motivo conviene intentar siempre llegar un acuerdo previamente.
Si se consigue llegar a aceptar la venta por parte de todos los copropietarios, pero necesitáis hacerlo de una forma rápida y que no suponga apenas gestión de trámites, la mejor alternativa es vender tu piso a una empresa como Tiko. Ellos pueden comprar un piso en apenas una semana, y se ocupan de todo el papeleo. Además, al ser expertos inmobiliarios, pueden asesorar en la venta de una vivienda entre varios propietarios.